EL DESTINO NO ESTA ESCRITO FINAL Y EPILOGO NAUFRAGOS

Tengo 45 años, mi aspecto físico es como si tuviera diez más, lo sé Marta, he tenido lo que se puede llamar mala suerte, esto es la historia de millones de mujeres que sufrimos día a día en pleno siglo XXI, ¿sabes lo peor de todo? las secuelas que me ha dejado todo esto, mis constantes depresiones, mi baja autoestima, mi desconfianza a todo el mundo que me rodea, la sensación siempre de que la culpa sería mía, la bulimia que supere, el miedo al contacto humano y lo más importante la imposibilidad de ser madre nunca.

Marta escuchó atenta su relato, sin pestañear y sin plasmar en esta historia detalles escabrosos que todos conocemos, de indefensión, impotencia, servilismo, dependencia, fragilidad y todas las definiciones unidas a una larga existencia de malos tratos.

Solo os puedo contar, que desde esta historia y hasta la fecha, somos grandes amigas, que superamos juntas las carencias de cada una, con dotes de ingenio, humor y buenos ratos de conversación, Rosa después de largas y costosas trabas que intentamos paliar juntas, hoy es madre adoptiva de un niño precioso, que se llama Ruben.

NAUFRAGOS (epilogo)

Marta dedició terminar su historía, no sin antes añadir unas pinceladas que le había sugerido tanta misería humana.

Cada vez hay más rupturas, quiza porque ya no se aguanta tanto, Antes también había malos tratos o dominación del hombre sobre la mujer, o desvinculacion del hombre en las tareas domésticas. La diferencia es que antes se toleraba y hoy ya no.

El factor determinante para la ruptura de un matrimonio, claro esta, es el hecho de que se cuele una tercera persona, esa infidelidad lleva las cosas al límite, pero lo cierto es que, siempre durante pongamos 15 años años de convivencia, te vas desencantando en muchos aspectos, máxime si además existe un claro historial de malos tratos físicos y psicologicos, no nos olvidemos que los segundos son tan o más demoledores que los primeros, con la clara diferencia de que puedes salir a la calle sin usar gafas sol.  .

Las mujeres nos solemos quejar de que ellos no nos entienden o no nos miman como desearíamos, que no nos hacen sentir deseadas, pero tambien los hombres se sienten muy presionados, porque la mujer ha pasado de tener una parte pasiva en la relación a mostrar sus exigencias de forma activa. ¿Nos desenamoramos más porque somos más exigentes con nuestras parejas? o es lo mismo pero ahora resulta más sencillo tanto establecer como romper vinculos?, yo diría que sí, y en gran medida las nuevas tecnologias, estan siendo un acicate para volver a vivir el amor romantico, sin compromisos, sin responsabilidades, y en la medida de lo posible sin discusiones, aunque me cuentan, que hay gente que discute hasta por whatsapp, con emoticonos furiosos y caritas felices tirando besos a troche y moche en sus reconciliaciones.

"Y entonces es cuando se da cuenta de que el ancla ya se ha hundido, de que la perdió hace tiempo aunque no se haga a la idea, de que todo lo que le daba estabilidad se pierde en la inmensidad del mar y con nostalgia sólo puede mirar atrás y ver como se hunde más y más sin las esperanza de que vuelva a salir a flote. El barco vuelve a navegar ¿destino? un futuro incierto, confiados en que un día llegaremos a puerto seguro donde la felicidad abunde y la nostalgia tenga miedo de desembarcar, y me enfoque hacía un futuro incierto pero trepidante y seguramente lleno de grandes momentos".

Después de todo, ¿nos queda las esperanza de que exista un amor para siempre?

Esta entrada NAUFRAGOS, esta especialmente dedicada a mis amigas, muchas de ellas navegando de nuevo en un futuro incierto pero guapas y felices.