POLVO PARA EL RECUERDO CAPITULO VI

Berta se quito el guante de lana negro de su mano izquierda y acaricio la cara de Pablo, el puso su mano encina de la de ella y las atrapo contra su hombro y en su cara se dibujo una sonrisa llena de ternura.

Pablo le agarro su mano, la miro a los ojos y le dijo, volvamos por favor necesito estar a solas contigo, necesito que tu me necesites, que estas horas juntos sean solo un precioso alto en el camino de los dos, sin conflictos, sin rechazos, sin pedir factura ni al pasado ni al futuro, olvidandonos por unos instantes de quien somos en realidad, y de lo que fuimos, yo te he vuelto a encontrar y solo por eso merecemos esta ultima oportunidad, no podemos estar en el presente añorando el pasado sin atrevernos ni tan siquiera a revivir algo que nos pertenece.

Mira Berta, pensaba en ti mucho antes de encontrarte, sentía esa curiosidad humana por todo lo que un día nos perteneció, quizá instintivamente por eso te busque, aún a sabiendas de tu posible rechazo, de tu olvido más que razonable, quizá te parezca muy atrevido pero a estas alturas de mi vida, intento no ocultar mis sentimientos, creo que hemos mantenido una relación sana durante este tiempo.

Pablo me estas pidiendo básicamente ¿que me acueste contigo?..porque nos lo debemos, ¿dices? y tal vez porque piensas que no puede fallar, que esto solo es algo pasajero un como lo llamaremos...."polvo para el recuerdo", donde nuestros cuerpos se encamen solo por el mutuo afecto que nos tuvimos, o por la gracia de como sera ahora, con la experiencia acumulada, sin pudor, sin reproches, sin ataduras, sin amor.

La verdad, Pablo estoy totalmente decepcionada, esperaba algo.., mas sensual, menos obvio, más elaborado, pero claro la inmadurez en estas maravillosas artes del amor, os dejan con los recursos justos para entrar, "a matar" sin tan siquiera agotar el  "juego de la seducción".

 

Berta vamos, te invito a un nuevo café, vuelve hacer frió, así me sigues contando todas las cosas que están  dentro de esa mente prodigiosa, que me tiene conquistado, desde tus pensamientos a tus ideas locas, te has convertido en una mujer mas interesante que en el pasado si eso es posible. El coche arranco poniendo dirección al hotel.

Berta, miraba por el cristal lleno de vaho, sus manos escribieron "frío", había algo en el nuevo Pablo que no terminaba de encajar, demasiado entregado, demasiado fácil, ella le recordaba hábil, difícil, luchador incansable, es posible que su mente le estuviera jugando una mala pasada. De pronto le asalto una idea...Pablo, Pablo, coje esa calle que sale al fondo a la izquierda...donde vamos Berta....ya lo veras ten un poco de paciencia.