LA INDIFERENCIA.
Dicen los orientales que el aleteo de una mariposa en un hemisferio puede producir un huracán en el otro A menudo creemos que ser indiferente es una actitud pasiva que consiste en no hacer una acción, por ejemplo, no elogiar a nuestra pareja, nuestros hijos, nuestros padres, nuestros amigos, no compartir sus inquietudes y problemas, no manifestarle nuestro cariño. Sin embargo yo creo, que la indiferencia no consiste sólo en dejar de hacer algo, también consiste en dañar mediante la ausencia de nuestra intervención allí donde nuestra intervención sería esperable, todos esperamos algo del otro y el otro también espera algo de nosotros. Cuando esa espera se ve frustrada, la relación se resiente. Por ejemplo, llegar tarde a una cita, hacer aquello que se sabe que al otro le molesta, desoír sus reclamos, son actitudes que pueden también encuadrarse dentro de la indiferencia porque tienen como rasgo en común las demandas o expectativas del otro. Contrariamente a l...