72 horas
Recogió sus cosas lentamente, apilo sus libros, sus maletas abiertas reposaban en la cama, donde caían lentamente todas sus cosas, un trapo aquí, otro allá, con la mirada perdida, los ojos llorosos, una pena le oscurecía el alma, atrás quedaban años de convivencia, de seguridad, de amor, de sueños, de proyectos.
Todo había sido un fraude, un engaño, una pesadilla, uno tras otro, se iban sucediendo los ultimos días en su cabeza, ella siempre tuvo la certeza de que aquello no funcionaria, que solo había sido una ilusión óptica, pero quiso creer que por intentarlo.....se equivoco, la piedra en el zapato se convirtió en pesada losa, donde los silencios abarrotaban el salón día a día, y la endemoniada culpabilidad tiraba por tierra, los últimos cinco años donde fueron felices, o eso creyeron.
Mientras envolvía una a una sus tazas de colores en papel periódico, pensaba en la sinrazón de algo honesto, convertido en algo tan ruin en muy pocas horas.
Término de llenar sus maletas, las coloco en la puerta, mientras con un rotulador rojo escribía una nota en la nevera, la doblo cuidadosamente, la cogió con el imán de su ultimo viaje y puso su nombre dejo las llaves en el cenicero de la entrada, tiro del pomo de la puerta y se alejo.
La tristeza la estaba matando, pero ya era tarde, todo era tarde, salió despacio y en silencio, por el rellano se podían oír las ruedas de las maletas alejándose.
Se paro se sentó en un banco para analizar las ultimas 72 horas, no le gusto lo que su mente vio y pensó, desecho aquellas ideas, se dirigió a la estación, allí saldría un tren, que la llevara lejos, muy lejos de su pasado, eso es justamente lo que necesitaba ahora.
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