BERTA y PABLO ULTIMO CAP.
Los nudillos en la puerta eran claros, toc, toc. Pablo se había tumbado en la cama sumido en sus pensamientos, abrió los ojos de un salto fue hacia la puerta solo eran las cuatro y media. Su sorpresa fue mayúscula, ¿Berta? ¿que haces aquí?, ella entro, le miro a la cara, al tiempo que comenzó a llorar de impotencia.
Es Miguel, como sabes comimos juntos, me ha dejado aquí en un taxi y se ha marchado para siempre.
Me ha contado tan cosas.....al principio no entendía nada, pero la gravedad de sus declaraciones me han hecho sentirme muy mal, me ha dicho que los grandes amores están llenos de sufrimiento, que me había llevado dentro durante muchos años, que su historia era la de un hombre con un corazón roto, me contó tambien que "al desamor se sobrevivía," aunque nada volvía a ser lo mismo cuando las ganas y el destino te quitaban las fuerzas para luchar por ese amor verdadero, añadió un -se de lo que te hablo Berta créeme, me contó que en estos momentos todo le daba igual porque estaba enfermo, me explico que no iba a morir pero su cerebro si lo hacia poco a poco lentamente, desde hacia varios años.
Ahora entiendo su comportamiento cuando me vio en la estación de tren hace cuatro años, su enfermedad estaba ya en la primera fase.
-¿En la primera fase?,
-de que hablas Berta
-Miguel tiene Alzheimer Pablo
-pero ¿que dices?
Pablo cogió su teléfono móvil marco un ultimo contacto agregado a su agenda recientemente, el teléfono dio varios tonos no hubo respuesta, a los pocos segundos recibió un mensaje de texto.
Pablo cogió su teléfono móvil marco un ultimo contacto agregado a su agenda recientemente, el teléfono dio varios tonos no hubo respuesta, a los pocos segundos recibió un mensaje de texto.
"Pablo te supongo enterado de la noticia, porque ella esta contigo, al final me arme de valor y le dije a mi manera que la quería, aunque treinta años tarde, cuidala mucho como tiempo atrás supiste hacer, no la vuelvas a cagar, la vida no da siempre segundas oportunidades, ella te necesita aunque este confusa como yo".
Un fuerte abrazo viejo amigo ahora que todavía puedo recordar quien eres",
Pablo tiro el teléfono encima de la cama, abrazo a Berta y empezó a llorar como un niño los acontecimientos les superaban, de repente Berta le beso dejandose llevar por las emociones tanto tiempo acumuladas, el correspondió con otro beso y los instintos afloraron para ambos, sus manos empezaron a recorrerse con deseo y lujuria como si no hubiera nada mas allá entre las cuatro paredes de la habitación de ese hotel, ni el pasado arrollador, ni su presente elegido, ni las dudas, ni las incertidumbres ni los recelos, ni tan siquiera las consecuencias que traería todo aquello, el tiempo no había pasado para ellos se congeló en aquellos instantes.
Pablo la miro a los ojos seco sus lágrimas con el envés de su mano y espero su aprobación muda, la memoria era tenaz y tramposa, a cada nueva caricia, su piel comenzaba a resultar familiar recordaba olores, sabores que su cabeza le devolvía mas intensos y dulces, recuerdos llenos de nostalgia, que convirtieron su encuentro en una explosión de emociones y sentimientos donde sus cuerpos eran el exponente de esta vieja canción que se repetía lentamente entre sus sabanas.
Tú, sin más porqué,
tú, que bésame,
tú, me tienes de furriel
de un roto de tu piel.
Tú, como la cal
que húmeda es mortal,
tú, blanqueas mi razón
calando hasta el colchón,
Tú.
Tú, montada en mi.
Yo, montura hostil.
Tú, me abrazas con los pies
y yo lamo el arnés
Tú, y sin ti yo no.
Tú, y sin ti ya no.
Tú, me has hecho dimitir
y hoy yo se dice asi:
tú, que bésame,
tú, me tienes de furriel
de un roto de tu piel.
Tú, como la cal
que húmeda es mortal,
tú, blanqueas mi razón
calando hasta el colchón,
Tú.
Tú, montada en mi.
Yo, montura hostil.
Tú, me abrazas con los pies
y yo lamo el arnés
Tú, y sin ti yo no.
Tú, y sin ti ya no.
Tú, me has hecho dimitir
y hoy yo se dice asi:
.....Berta abrió sus ojos con pereza como todas las mañanas, el sonido del maldito teléfono la despertaba lo paro, miro a su marido que se removía entre las sabanas, se sentó al borde de la cama miró por el ventanal hacía el horizonte, entro en el baño se miró al espejo abrió bien los ojos y una sonrisa picara asomaba a su cara, parecía tan real, tenía tantos detalles, podía incluso notarlo en su piel y en su boca, era difícil creer que no había ocurrido, se ducho se seco el pelo, se arreglo con detenimiento prestando gran atención a su ropa y a su maquillaje, se asomo desde la puerta del baño y le vio dormir plácidamente, se acerco a los pies de la cama muy despacio y le beso.
Llegaba tarde, bajo las escaleras de tres en tres, y comprobó que lo llevaba todo, sonó el cierre automático de su coche y su puerta de garaje se estaba abriendo, se sentó dejo el movil en el asiento de al lado, el bolso en el suelo y de repente el teléfono empezó a vibrar la pantalla le anunciaba un nuevo whatsapp.....
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